jueves, 24 de febrero de 2011

Tinta de celulas solares de nanoparticulas.

Es un concepto aún en desarrollo y más que futurista, pero suena interesante: células fotovoltaicas compuestas de nanopartículas que forman una especie de tinta que puede imprimirse o aplicarse con una mano de pintura.
Además, serían mucho más baratas que las actuales,
Lower-cost solar cells to be printed like newspaper, painted on rooftops - Es básicamente lo que necesitamos para hacer que la tecnología fotovoltaica se vuelva de uso común. El sol proporciona una cantidad casi ilimitada de materia prima, pero las actuales tecnología de captación de energía solar son muy caras y no pueden competir con los combustibles fósiles.
Los nanomateriales que forman la pintura solar (10.000 veces más pequeñas que el grosor de un cabello humano) capturan la energía solar de forma muy eficiente aplicando varias manos de material sobre tejados o fachadas. Además son semitransparentes, lo que posibilitaría la fabricación de ventanas capaces de funcionar como paneles solares.
"Tinta" de nanopartículas capaces de capturar la energía solar.
Imagen: Cockrell School of Engineering, The University of Texas at Austin

domingo, 20 de febrero de 2011

Pintura: ¿fuente de energía?

Células solares de silicio, de arseniuro (en el espacio), de capa delgada, un 41 por ciento de eficiencia, «lupas» solares, un cristal que permite aumentar en un 30 % su eficiencia energética... Y a toda esta lista de avances alcanzados en los últimos años por el sector (dentro y fuera de nuestras fronteras), habrá que sumar en muy poco tiempo la pintura solar. O para ser más exactos una película que, aplicada sobre superficies metálicas, actúa como un panel solar. Un grupo de investigadores de la Universidad de Swansea (Gales, Reino Unido), en colaboración con el grupo Corus, están desarrollando una película que, aplicada a modo de pintura sobre una superficie de acero (material habitual en la construcción), permitirá generar electricidad de la radiación solar. 
El principal objetivo del estudio es «lograr reducir el coste actual de los paneles solares consiguiendo producir una tecnología más barata», hace hincapié Bob Jones, del grupo Corus. Para lograr esta misión, el grupo de expertos cuenta, según Jones, «con 11,32 millones de euros de inversión, dotados casi la mitad por el Gobierno de Gales y la otra mitad por dos entidades privadas». Todo comenzó cuando uno de los estudiantes de Ingeniería de la Universidad de Swansea fue a averiguar cómo la radiación solar interactúa con la pintura y se degrada. A partir de ahí se pusieron a investigar si pudiera existir un nuevo método para capturar esta fuente renovable. Tras recibir la ayuda económica, comenzaron con el proyecto en el mes de octubre del año 2008. 


Sin embargo, desde la Universidad de Swansea confían en que esta nueva tecnología pueda generar tanta electricidad como 50 parques eólicos, por aquello de que Corus Colours, filial del grupo Corus, produce unos 100 millones de metros cuadrados de construcción revestida de acero. Si fuera tratado todo ese material con esta película solar se podrían generar 4.500 gigavatios de electricidad al año. Para saberlo, eso sí, todavía habrá que esperar. «Se trata de Investigación y Desarrollo (I+D), por lo que no está a escala comercial como las células solares o la fotovoltaica de capa delgada. Hay varias investigaciones al respecto sobre todo de sprays elaborados con compuestos de silicio con los que pretenden otorgar propiedades fotosensibles si se aplican sobre una superficie», explica Tomás Díaz, de la Asociación de la Industria Fotovoltaica (ASIF).